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Ciudad Acuña, Coahuila, México | 25 de Abril del 2024

Hay alivio para hambruna en África Oriental, pero se necesita más ayuda

Washington, EE.UU. Seis meses después de que la comunidad humanitaria internacional entró en estado de crisis, los 13 millones de personas afectadas por la sequía en el África Oriental han evitado el desastre, pero todavía necesitan ayuda de emergencia.

Según dijo Bruce Wharton, vicesecretario adjunto de Estado para Diplomacia Pública en la Oficina de Asuntos Africanos del Departamento de Estado, se han logrado “mejoras significativas” en aliviar lo que sigue siendo una de las peores crisis humanitarias del mundo. Sin embargo, agregó, “esta crisis no ha terminado todavía, las necesidades siguen siendo enormes”.

Wharton y otros dos funcionarios de Estados Unidos charlaron con periodistas en una teleconferencia que tuvo lugar el 24 de enero. Estados Unidos sigue siendo el mayor donante a la región, con cerca de 870 millones de dólares de asistencia otorgada durante el último año y medio. Los funcionarios estadounidenses elogiaron la generosidad y hospitalidad brindada por Etiopía y Kenia al proporcionar acogida y asistencia a los somalíes. La hambruna ha llevado a millones de somalíes a abandonar sus tierras en busca de ayuda.

El secretario de Estado adjunto para Población, Refugiados y Migración David W. Robinson dijo por su parte que, sin el apoyo de los kenianos y etíopes, muchos somalíes más habrían muerto en condiciones de hambruna.

“Kenia ya fue anfitrión de cientos de miles de somalíes que habían huido en los últimos años” debido a los conflictos y la inseguridad en su país, dijo Robinson. “Y solo en el 2011, otros 300.000 somalíes huyeron a Etiopía y Kenia, con lo que el total de desplazados somalíes en el Cuerno de África se sitúa en alrededor de 955.000 personas”.

El esfuerzo humanitario en Somalia se ha visto obstaculizado desde el principio por las amenazas de violencia y ataques perpetrados por al-Shabaab, una organización designada como grupo terrorista por el Departamento de Estado. El grupo ha impedido que las organizaciones humanitarias que intentan proporcionar socorro accedan a zonas bajo su control.

Nancy Lindborg, administradora adjunta en la unidad de Democracia, Conflictos y Ayuda Humanitaria de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), dijo que las acciones de al-Shabaab dirigidas a expulsar a 16 organizaciones humanitarias es un “factor de complicación… que es un problema posiblemente grave”.

La amenaza permanente de al-Shabaab ha coartado las actividades de las organizaciones humanitarias. “Muchas de nuestras actividades funcionan ahora en niveles mínimos, dirigidos a sustentar la vida”, dijo Robinson. “Las actividades que normalmente desarrollamos en situaciones prolongadas para los refugiados, incluidos los medios de subsistencia, la educación y otras cosas, se llevan a cabo de forma muy limitada en este momento” debido a los problemas de seguridad.

Las actividades humanitarias respaldadas por Estados Unidos en las vecinas Etiopía y Kenia no encaran el reto de seguridad y avanzan con programas dirigidos a aliviar el sufrimiento y a preparar mejor a la población para afrontar las condiciones climáticas de la región que azotan la tierra y causan repetidos desastres humanitarios.

Lindborg dijo que Estados Unidos y el Banco Mundial han venido trabajando con el gobierno de Etiopía para ayudar a los pastores a alcanzar un mayor nivel de autosuficiencia para soportar los años difíciles. Se calcula que 7,5 millones de personas han evitado situaciones de emergencia gracias a estos programas.

En Somalia, la movilización de ayuda que USAID comenzó a dirigir en julio de 2011 ha dado resultado, dijo Lindborg. “La cifra de 750.000 personas que se encontraban en situación de hambruna se ha visto reducida a 250.000 personas” a fecha de noviembre, y en tres de las seis zonas somalíes designadas como zonas de hambruna, la severidad de la hambruna se ha reducido.

Con demasiada frecuencia la enfermedad a menudo se convierte en el acto que sigue a la hambruna a medida que las personas desnutridas se trasladan a campamentos atestados de gente en busca de sustento. La agencia de refugiados de la ONU manifestó su preocupación el 24 de enero en torno a dos casos de los que se sospecha que son poliomielitis en los campamentos de refugiados somalíes en Etiopía. Las muestras se han enviado a un laboratorio en Adis Abeba para confirmar el diagnóstico de poliomielitis.

“Una vez que la cepa del virus haya sido identificado, se enviará la vacuna adecuada a Dollo Ado [emplazamiento donde se encuentran los campamentos] para llevar a cabo una campaña de vacunación masiva en los campamentos y las comunidades de los alrededores”, dijo la portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Melissa Fleming, en declaraciones a la prensa en la sede del ACNUR en Ginebra.

Fleming agregó que el ACNUR y otros organismos que trabajan en los campamentos están intensificando sus actividades de vigilancia para asegurarse de que detecten posteriores casos de la enfermedad contagiosa. También se centrará mayor atención en el agua potable y el saneamiento a fin de eliminar esas posibles vías de transmisión del virus de la polio.

Si bien los países donantes y las organizaciones humanitarias han de permanecer enfocados en las necesidades inmediatas de las poblaciones en el África oriental, los esfuerzos de asistencia de Estados Unidos también se centran en el largo plazo. Lindborg citó como ejemplo la iniciativa Alimentar el Futuro, de la administración Obama. “El objetivo es ayudar a las comunidades que tienen déficits crónicos de alimentos y que siempre están al borde de la crisis, para que puedan avanzar hacia un futuro más productivo y encaminarse hacia el desarrollo”, dijo.

No obstante, los programas de asistencia y ayuda humanitaria no son una solución a largo plazo en Somalia. “La respuesta a las crisis humanitarias en Somalia será establecer un gobierno seguro y estable”, dijo Wharton, “un gobierno que respete los derechos humanos y las necesidades básicas de la población”.

Por: Charlene Porter, Redactora

Etiquetas: África, ayuda, hambruna, internacional, USA